[wd_hustle id=”InArticleOptincopy” type=”embedded”/]
Contxto – Aquí tengo algo irónico para ti: el 26 de febrero, el gobierno chino le donó a su contraparte boliviana software y hardware armados con termosensores bastante costosos. Esto para que fueran instalados en aeropuertos clave para llevar a cabo escaneos de cuerpo completo a cualquier transeúnte.
La meta es detectar si alguien tiene una temperatura inusual. En otras palabras, determinar si tienen fiebre, un síntoma clave de ese latoso coronavirus (COV-19) que ha estado presente últimamente.
Mientras tanto, un par de emprendedores bolivianos y un venezolano están desarrollando la tecnología por sí mismos. La startup, View Factor, está trabajando en “Astrom Thermosense”. Este producto de nombre elegante está equipado con inteligencia artificial (IA) para tomar la temperatura corporal de las personas.
Una solución muy necesaria en áreas donde se reúnen grandes cantidades de personas y donde tomar la temperatura de una persona a la vez es ineficiente.
El producto en sí, supuestamente, seguía en desarrollo en febrero y sus creadores declararon que costará alrededor de US$30,000.
View Factor “ve” tu temperatura
Este tipo de tecnología termo-sensorial ya ha sido implementada en otras partes del mundo para detectar al COVID-19. Sin embargo, también está siendo desarrollada por los emprendedores latinoamericanos, Alejandro Galindo y Rodrigo Dávila de Bolivia, junto con el venezolano Alberto Quintero.
El sistema que crearon detecta temperaturas usando inteligencia artificial equipada con visión artificial para “ver” personas y tomar su temperatura de una forma no invasiva.
Esto es posible a través de la instalación de dos cámaras. Una para identificar caras y la otra es termográfica. La primera detecta cuando una cara entra a cuadro, mientras que la segunda toma la temperatura de la “cara”.
Y supuestamente todo esto sucede en menos de un segundo.
Las autoridades sanitarias todavía están luchando para controlar la propagación de la enfermedad y todos nosotros seguimos observando incómodos a esa persona que tosió demasiadas veces y que no está usando un tapabocas.
Sin embargo, yo espero que la próxima vez que algo así suceda (porque volverá a pasar) tendremos la tecnología para controlarlo mejor.
Eso y que las personas tengan más sentido común y se abstengan de viajar si muestran síntomas.
La tecnología no puede arreglar la insensatez humana, ¿saben?
Artículos relacionados: ¡Tecnología y startups de Bolivia!
-ML
Traducido por Alejandra Rodríguez
